Digitalización: ¿una pérdida de tiempo?

Si bien la digitalización ofrece un gran potencial para la optimización, trabajar con papel sigue estando a la orden del día en muchas medianas empresas. Según la asociación digital Bitkom, los principales obstáculos para la digitalización son los elevados costes de inversión y la falta general de tiempo.

Sin embargo, el factor humano también juega un papel importante. Porque si los empleados no están completamente convencidos de los beneficios de la digitalización, se inhibirá la implementación de cualquier innovación. Por eso es importante que las empresas involucren a sus empleados en el proceso de transformación digital, paso a paso desde el principio. No es necesario hacerlo todo de un día para otro, por el contrario, se logra mucho más yendo paso a paso. Un buen punto de partida hacia la digitalización es la gestión de facturas.

La gestión de facturas como punto de entrada para la transformación digital

Después de todo, las facturas, los recibos y otros documentos llegan no solo por correo postal, sino también a través de varias bandejas de entrada de correo electrónico o incluso tienen que recopilarse de varios portales.

Por ejemplo, el tiempo de facturación suele ser demasiado largo para aprovechar los descuentos por pronto pago. GetMyInvoices soluciona este problema al recuperar automáticamente los recibos de varias fuentes. Además, GetMyInvoices incluye una aplicación móvil que captura los recibos en papel y los carga fácilmente. De esta forma, todos los documentos están disponibles de forma centralizada. La verificación o aprobación de facturas digitales también forma parte del alcance funcional.

Las medidas de digitalización minimizan el esfuerzo requerido en la contabilidad

El módulo bancario integrado conecta cuentas y tarjetas de crédito con la solución de gestión de facturas para importar transacciones. Luego, hace coincidir automáticamente las transacciones con sus documentos asociados, liberando a los usuarios de esta laboriosa tarea manual. Luego, las facturas se transfieren automáticamente al software de contabilidad, al gestor o a otras aplicaciones. Esto permite a los usuarios no solo ahorrar trabajo de contabilidad, sino también reducir significativamente el tiempo de respuesta de las facturas.

Por lo tanto, la digitalización no es un propósito en sí mismo, sino una forma pragmática de agilizar los procesos y liberar a los empleados de las actividades rutinarias. Esto se aplica a la contabilidad en particular. Con la ayuda de soluciones inteligentes de gestión de facturas, las empresas pueden ahorrar alrededor de diez horas, doce kilos de papel y muchos nervios cada mes.